Violencia Silenciosa: Extras capítulo 21

- ¿Qué pasó, Bella? – preguntó haciéndose a la idea de que quizás ella no respondiera.

- ¿De verdad me amas, Edward? – respondió ella con otra pregunta.

- Claro, es algo de lo que cada día estoy más seguro – declaró él. No sabía de qué iba esa pregunta, pero el sabía muy bien la respuesta.

- ¿No crees que a nosotros solo nos ha unido el dolor? – continuó cuestionando ella como si no hubiese escuchado su respuesta.

- ¿De dónde sacaste eso? – contraatacó en aquella rara ronda de preguntas. Ella se quitó el cinturón de seguridad y se volteó dejando caer sus pies en el exterior. Mientras, la lluvia seguía empapándolo todo, incluido él.

- La doctora Powell dijo que a nosotros nos unía el dolor, no el amor, y que una vez que hayamos sanado ya no nos necesitaremos – susurró con voz quedita, levantando la mirada –. Sé que los cuentos de hadas no existen, pero me gustaría saber al menos que esto es real – agregó

Edward iba a decirle que eso no era cierto, que él la amaba y que aquella mujer estaba equivocada; sin embargo, su teléfono móvil vibró en sus pantalones y tuvo que guardarse aquellas palabras para contestar.

- Edward – distinguió la voz de Renee Swan, feliz al otro lado – Necesito que vengan a casa, ha llamado la abogada, son buenas noticias –.

Colgó sin dejarlo decir nada. Miró a Bella indicándole solo con sus ojos que esa conversación debería postergarse para otro momento. Bella volvió a entrar completamente en el automóvil y cerró la puerta. Él subió rápidamente con una sonrisa en sus labios, conforme de que por fin algo estuviese saliendo bien.

- Bella – llamó su atención y tomó su mano para luego meter el cambio y salir –, yo tampoco creo en cuentos de hadas, pero creo en ti, en mí y en el amor que sentimos por el otro – la miró y ambos sonrieron para el otro –. Todo saldrá bien, cariño –.

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Bella era como una droga, lo mataba lentamente, era su talón de Aquiles; verla y acosarla era lo único que le mantenía sereno, era lo que le aseguraba que en un universo paralelo - sin Jacob, sin Edward, incluso sin Lauren – ellos hubiesen sido felices.

Comenzó a tararear la canción mientras el cigarrillo se consumía, tal cual lo hacían sus sueños de vivir ese amor que lo dañaba, pero que sin él no podía seguir tampoco.

Some day you will find me

Caught beneath the landslide

In a champagne supernova

A champagne supernova

Así es como se sentía, atrapado en esa espiral. No podía tenerla, ambos se habían dañado demasiado, pero tampoco podía dejarla ir. El miedo que reflejaban sus ojos oscuros le hacía sentir victorioso, mas era solo una falsa victoria, pues el miedo también la alejaban cada vez más.

Bella había sido su todo. Cuando la conoció todo se veía maravilloso, pero tuvo que meterse Jacob en medio para derrumbar todo lo que él en poco tiempo había construido. Ella cambió luego, ya no fue más aquella desinhibida chica de 15 años y él no pudo contra eso, no podía seguir como si nada cuando Jacob le recordaba día a día lo que ella había hecho con él y no consigo.

How many special people change?

How many lives are living strange?

Where were you while we were getting high?

While we were getting high...

La canción terminó, pero de inmediato volvió a sonar otra vez, y otra más, hasta que perdió la cuenta cuántas veces la había repetido a lo largo de la tarde. Estaba siendo patético, pero pensar en ella siempre lo habían hecho débil y sin razonamiento.

¿Y Donde estaba ella?

En los brazos de otro, como siempre.