Despertó y al ver la claridad del día se percató que se había quedado dormida y que ya no llegaría a la primera clase en el instituto.
Lo extraño, sin embargo, no era el despertar tarde, sino el haber soñado con Jacob, ya que desde que había muerto, ella ni siquiera se permitía un segundo para pensar en él.
Movió la cabeza en negación, seguramente eran las fechas, ya que al día siguiente se cumplían dos años desde aquel día, además de que se le acaba el plazo para entregar a Mike… Edward estaba muy molesto por ello y ella no quería que el inocente se arrepintiera del trato que terminaría por destruir a Isabella Swan.
Suspiró y se obligó a levantarse, pero cuando lo hacía se percató que Mike estaba sentado en la silla de su tocador, con la mirada más vacía que antes y suplicando silenciosamente por ayuda... al parecer su racha de suerte aún la acompañaba y eso la hizo sonreír mentalmente mientras hilaba los próximos pasos a seguir.
Nos leemos pronto
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